Líneas de intervención
- Enfoque grupal
- Proceso individualizado
- Recurso complementario
- Proceso abierto
- Distribución por perfiles
Distribución por perfiles
Debido a la creciente conflictividad de los adolescente y sus familias atendidas en Norbera y la importancia de adaptar nuestra intervención a las nuevas problemáticas, surge la necesidad de establecer una distribución por perfiles de los usuarios atendidos.
Para mejorar nuestra intervención necesitamos crear nuevos itinerarios según el grado de conflictividad-necesidad de los usuarios, diferenciándolos en tres perfiles:
- Perfil 1: Las dificultades y/o carencias que presenta el adolescente a nivel personal y/o comportamental son de baja intensidad. Sin embargo, son susceptibles de ser atendidas para prevenir que tiendan a agravarse, favoreciendo de esta forma el adecuado desarrollo evolutivo del adolescente.
- Perfil 2: Las dificultades y/o carencias que presenta el adolescente a nivel personal y/o comportamental, son de intensidad media. Pueden darse dificultades a nivel interpersonal, carencias personales, emocionales, afectivas, así como otras alteraciones que pongan en peligro su adecuado desarrollo biopsicosocial.
- Perfil 3: Las dificultades y/o carencias que presenta el adolescente a nivel personal y/o comportamental son de alta intensidad. Los comportamientos que está manifestando el adolescente, ponen en peligro su adecuado desarrollo físico, psicológico y social. De dichos comportamientos se pueden derivar graves problemas personales, sociales y/o familiares.
Debido a la creciente conflictividad de los adolescente y sus familias atendidas en Norbera y la importancia de adaptar nuestra intervención a las nuevas problemáticas, surge la necesidad de establecer una distribución por perfiles de los usuarios atendidos.
Para mejorar nuestra intervención necesitamos crear nuevos itinerarios según el grado de conflictividad-necesidad de los usuarios, diferenciándolos en tres perfiles:
Perfil 1: Las dificultades y/o carencias que presenta el adolescente a nivel personal y/o comportamental son de baja intensidad. Sin embargo, son susceptibles de ser atendidas para prevenir que tiendan a agravarse, favoreciendo de esta forma el adecuado desarrollo evolutivo del adolescente.
Perfil 2: Las dificultades y/o carencias que presenta el adolescente a nivel personal y/o comportamental, son de intensidad media. Pueden darse dificultades a nivel interpersonal, carencias personales, emocionales, afectivas, así como otras alteraciones que pongan en peligro su adecuado desarrollo biopsicosocial.
Perfil 3: Las dificultades y/o carencias que presenta el adolescente a nivel personal y/o comportamental son de alta intensidad. Los comportamientos que está manifestando el adolescente, ponen en peligro su adecuado desarrollo físico, psicológico y social. De dichos comportamientos se pueden derivar graves problemas personales, sociales y/o familiares.
Para mejorar nuestra intervención necesitamos crear nuevos itinerarios según el grado de conflictividad-necesidad de los usuarios, diferenciándolos en tres perfiles:
Perfil 1: Las dificultades y/o carencias que presenta el adolescente a nivel personal y/o comportamental son de baja intensidad. Sin embargo, son susceptibles de ser atendidas para prevenir que tiendan a agravarse, favoreciendo de esta forma el adecuado desarrollo evolutivo del adolescente.
Perfil 2: Las dificultades y/o carencias que presenta el adolescente a nivel personal y/o comportamental, son de intensidad media. Pueden darse dificultades a nivel interpersonal, carencias personales, emocionales, afectivas, así como otras alteraciones que pongan en peligro su adecuado desarrollo biopsicosocial.
Perfil 3: Las dificultades y/o carencias que presenta el adolescente a nivel personal y/o comportamental son de alta intensidad. Los comportamientos que está manifestando el adolescente, ponen en peligro su adecuado desarrollo físico, psicológico y social. De dichos comportamientos se pueden derivar graves problemas personales, sociales y/o familiares.